
Dicen que cualquier pasado es mejor y ahora que estamos en épocas navideñas mucha gente habrá recordado unas mejores fiestas en compañía de alguien o en mejores circunstancias.
También se puede aplicar este dicho a la televisión (sólo puedo opinar sobre la española). ¿Quién no recuerda levantarse de la cama un día cualquiera de Navidad y desayunar viendo el
Club Megatrix o el Club Disney, que duraban desde las 7.30 de la mañana hasta la 13.00 de la tarde?

Ahora, cuando un niño se levanta en estas fechas y pone la televisión se encuentra con programas de debate, corazón, salud o política. Así las mañanas navideñas para un niño son como un yogurt natural, que no saben a nada.
¿Quien no ha desayunado unos churros recien traídos por su madre viendo Goku o Spiderman? Ahora los niños tendrán que desayunar con el tazón de leche y los polvorones viendo a Ana Rosa Quintana o Saber Vivir.
Por lo que faltaba, hasta en la última Nochebuena defraudó Televisión Española (TVE). La cadena pública que se emite para todos los ciudadanos del país siempre ha sido la tradición de las familias en las grandes noches navideñas mostrando grandes shows, pero esta vez se limitaron a recordar las antiguas Nochebuenas en TVE. Salía el famoso de turno recordando su actuación en la gala de Nochebuena del año tal. Como sigamos así, nos ponen las cadenas de televisión las galas grabadas de hace 10 años.
En definitiva, parece que los buenos tiempos para la televisión española (en general) han pasado y que por suerte nuestra generación ha sido la última en vivirlos.